La conducta de los monos capuchinos puede inferirse de las marcas que dejan en sus herramientas

Brasil. ANTROPOLOGÍA / ARQUEOLOGÍA.-

Al estudiar ejemplares de esta especie que viven en una reserva ecológica en Brasil, los científicos han observado que utilizan instrumentos de piedra con tres finalidades: cavar, abrir semillas y frutos y golpear ‘piedra contra piedra’.

Mono capuchino/Tiago Falótico/EACH-USP.

Un grupo conformado por el primatólogo brasileño Tiago Falótico, de la Escuela de Artes, Ciencias y Humanidades de la Universidad de São Paulo (EACH-USP), arqueólogos del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (España) y de la University College London (Reino Unido) y un antropólogo del Max Planck Institute for Evolutionary Anthropology (Alemania), firma un artículo publicado en el Journal of Archeological Science: Reports que contiene un análisis comparativo entre las herramientas de piedra que emplean los monos capuchinos robustos del Parque Nacional de Serra da Capivara, en el estado de Piauí, Brasil. Se trata del primer estudio integrado de las herramientas percutoras que utilizan los monos capuchinos robustos silvestres en este país sudamericano.

Estos monos emplean dichos instrumentos en tres actividades: cavar, abrir semillas y frutos y golpear “piedra contra piedra” (Stone on Stone, o SoS). El objetivo del estudio consistía en saber si estas distintas actividades generaban en las herramientas marcas de uso que hicieran posible inferir posteriormente la finalidad para la cual se las había empleado.

“Un arqueólogo en el campo solamente cuenta para efectuar sus análisis con las herramientas que quedaron en los sitios arqueológicos y las marcas de uso que las mismas portan. En nuestro caso, teníamos tanto las herramientas utilizadas como la posibilidad de observar la conducta y saber cómo se las había empleado. Es la primera vez que se lleva a cabo un análisis comparativo de las distintas herramientas que emplean los monos capuchinos robustos con diversos fines. Y arribamos a la conclusión de que las herramientas percutoras exhiben diferentes patrones de uso y desgaste basados en las actividades realizadas con ellas. De este modo, es posible detectar, de acuerdo con las marcas que dejaron, las actividades que ejecutaron con las herramientas los ejemplares que las utilizaron”, resume Falótico.

Para abrir semillas encapsuladas o frutos como los del guapinol o el anacardo, los monos capuchinos robustos de aquella región (denominada Caatinga, el bioma semiárido brasileño) utilizan una piedra como yunque sobre la cual apoyan esos alimentos, y otra piedra para golpearlos. Para cavar en busca de tubérculos, raíces y artrópodos, manipulan las piedras directamente en el suelo con el objetivo de soltar o arrastrar la tierra.

“Ahora bien, la conducta de golpear una piedra contra otra piedra, en el caso de los grupos que estudiamos en Serra da Capivara, apunta a pulverizar guijarros de cuarzo, pues estos monos los lamen y se frotan el polvo de estas rocas. Es un comportamiento que solamente detectamos en aquellos ejemplares que existen allí. Tenemos algunas hipótesis para explicarlo, tales como el uso del cuarzo como antiparasitario, o para combatir ectoparásitos como los piojos y similares, lo que puede explicar el acto de frotarse contra las piedras. Tenemos que poner a prueba estas hipótesis. No es una conducta que aparece todo el tiempo, pero es común en aquella población.”

Este estudio cuenta con el apoyo de la FAPESP en el marco del Proyecto Joven Investigador intitulado “La variación cultural en monos capuchinos robustos (Sapajus spp.)”.

El ambiente evolutivo.

Según el primatólogo, los grupos existentes en biomas tales como la Caatinga y el Cerrado, la sabana brasileña, son más terrestres que los de la Amazonia o los del Bosque Atlántico. “Estos no emplean herramientas de piedra, pues bajan poco al piso, y esos instrumentos se usan en el suelo”. De acuerdo con Falótico, Serra da Capivara constituye un ambiente evolutivo muy parecido a aquel donde surgieron los primeros homínidos, que también pasaron a utilizar más el suelo y a empuñar herramientas de piedra. “De este modo, los monos capuchinos robustos pueden hacer las veces de modelo para entender cuáles fueron los factores que llevaron al uso de herramientas en el linaje humano.”

El investigador aclara que los ejemplares pueden utilizar una misma herramienta para más de una actividad, aunque esto es raro. “También depende un poco del ambiente. En Serra da Capivara hay muchas piedras, y estos animales pueden cambiar de herramientas fácilmente. En lugares donde existen menos recursos líticos, puede ser que utilicen las mismas piedras para realizar distintas actividades. Poseemos registros de uso de una piedra para cavar y después para abrir lo que surgió del pozo: un tubérculo.”

Los monos capuchinos robustos de la zona de Serra da Capivara utilizan también herramientas de madera, tales como varillas. “En este caso, estas herramientas pueden utilizarse fuera del piso. Y en este caso ellos las modifican en tamaño y forma: les quitan las ramas laterales. Puede existir una comprensión de las propiedades físicas de las herramientas. Esperábamos registrar esta conducta en otras poblaciones menos terrestres, pero no es lo que puede verse. Contamos con informes de que sucede ocasionalmente, pero no habitualmente como ocurre en Serra da Capivara.”

Estos monos pueden también emplear diferentes herramientas con un mismo objetivo. “Pueden utilizar una piedra para romper una hendidura en la rocha, y luego utilizar una varilla para sondar el agujero, por ejemplo.”

Como regla general, los machos manipulan un poco más los objetos que las hembras, cosa que no afecta a sus capacidades. “Tanto machos y hembras son buenos en el manipuleo una vez que adquieren la capacidad para ello, es decir, que se convierten en adultos.”

Una biblioteca de herramientas de primates.

El científico explica que la arqueología primate es un área de estudios relativamente reciente y, entre los primates, además de los humanos, solamente los chimpancés, los monos capuchinos robustos y los macacos cangrejeros (nativos de Asia) utilizan herramientas de piedra. “Hoy en día sabemos que cuando golpean piedra contra piedra, por ejemplo, los monos capuchinos robustos crean lascas de piedra muy parecidas a las que creaban los humanos ancestrales. Lo propio vale para las herramientas percutoras más sencillas utilizadas como martillos, que pueden confundirse con las herramientas empleadas por humanos con los mismos fines. En resumen: logramos aportarles un dato más a los arqueólogos, que se deparan con estos vestigios a menudo.”

Falótico revela que uno de los objetivos de la línea de investigación que orienta al Proyecto Joven Investigador consiste en conformar una biblioteca de herramientas de primates. “De estar descritas, les será más fácil a los arqueólogos y a los antropólogos saber posteriormente qué grupos las utilizaron y para qué.”

En particular en este estudio, el muestreo está formado por 29 herramientas: 16 empleadas exclusivamente para golpear, 12 para cavar y una para percutir SoS. El análisis tecnológico se basó en una clasificación que distingue dos categorías: elementos activos (martillos) y pasivos (yunques). Los científicos pretendían establecer patrones de desgaste de uso, y para ello analizaron atributos tales como métricas de las herramientas, la materia prima y las características de las superficies (fracturas, puntos de impacto, áreas dañadas formadas por impactos superpuestos y ubicación de las marcas percutoras).

Las herramientas utilizadas para cavar exhibieron menos marcas de uso y desgaste visibles en sus superficies cuando se las analizó microscópicamente. Las usadas para pulverizar el cuarzo fueron las que más exhibieron desgaste perceptible. En tanto, las herramientas de procesamiento de frutas y castañas de cajú mostraron una distribución espacial más amplia de marcas de trituración cuando se las comparó con las de cavar, aunque también mostraron una escasa modificación física.

Según Falótico, más que las marcas, el tamaño es una de las características que diferencian a estas herramientas, fundamentalmente a las utilizadas en la percusión SoS. El primatólogo afirma que son mucho mayores y más pesadas que las demás. “Las empleadas para cavar generalmente son menores y las elegidas para abrir semillas y frutos varían según su uso: para romper un recurso más duro y resistente, los monos utilizan piedras más grandes.”

Los investigadores intentaron analizar también los vestigios de hallados en las herramientas, a los efectos de descubrir las especies vegetales que los monos procesaron. “Identificamos granos de almidón y otros palinomorfos no polínicos (NPP), elementos orgánicos hallados comúnmente cuando se efectúan análisis de palinología, que es el área de la botánica que estudia el polen. Tuvimos ciertas dificultades, pues no contamos con una biblioteca de referencia para identificar el origen del polen y las fuentes de almidón que existen en la zona, en la Caatinga.”

Sitio Fuente: DICyT