Cómo mantener nuestro hígado sano

CUIDADO DE LA SALUD.-

El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano. Actúa como un verdadero laboratorio bioquímico. Sin embargo, muchas veces lo descuidamos hasta que aparecen señales de alerta.

¿Por qué es tan importante cuidar el hígado?

El hígado realiza más de 500 funciones vitales. Algunas de las más destacadas incluyen:

- Filtrar toxinas y sustancias nocivas del torrente sanguíneo.

- Sintetizar proteínas esenciales para la coagulación.

- Regular los niveles de colesterol y glucosa.

- Almacenar vitaminas y minerales.

- Metabolizar medicamentos y alcohol.

Un hígado dañado puede llevar a enfermedades graves como esteatosis hepática (hígado graso), hepatitis, cirrosis e incluso cáncer hepático.

Señales de alerta de un hígado sobrecargado.

Es importante estar atentos a síntomas que podrían indicar un mal funcionamiento hepático:

- Fatiga crónica.

- Digestiones lentas o pesadas.

- Náuseas frecuentes.

-Ictericia (coloración amarillenta en piel y ojos).

- Dolor o molestia en la parte superior derecha del abdomen.

7 claves científicas para mantener el hígado sano.

1. Aliméntate con una dieta equilibrada y antiinflamatoria.

Según la European Association for the Study of the Liver, una dieta mediterránea rica en frutas, verduras, legumbres, frutos secos, aceite de oliva y pescado azul reduce el riesgo de hígado graso no alcohólico. Evita el exceso de azúcares simples, grasas trans y ultraprocesados.

2. Evita el alcohol o consúmelo con moderación extrema.

El alcohol es una de las principales causas de daño hepático. Según la OMS, incluso consumos "moderados" pueden ser perjudiciales si se sostienen en el tiempo. Si decides beber, hazlo de forma ocasional y en dosis mínimas.

3. Mantén un peso saludable.

La obesidad está directamente asociada al desarrollo de hígado graso. La pérdida de apenas un 5-10% del peso corporal puede mejorar significativamente la función hepática, según diversos estudios clínicos.

4. Haz ejercicio regularmente.

La actividad física mejora la sensibilidad a la insulina y reduce la grasa hepática. La recomendación general es realizar al menos 150 minutos semanales de ejercicio aeróbico moderado.

5. Evita la automedicación y el abuso de fármacos.

Muchos medicamentos —incluidos algunos de venta libre como el paracetamol (acetaminofén)— pueden dañar el hígado si se consumen en exceso. Siempre consulta a un médico antes de iniciar tratamientos prolongados.

6. Protégete de hepatitis virales.

Las hepatitis B y C pueden evolucionar a enfermedades hepáticas crónicas. Vacúnate contra la hepatitis B y hazte análisis si has estado en riesgo de contagio. Usa preservativo y evita compartir jeringas u objetos punzantes.

7. Duerme bien y controla el estrés.

El hígado trabaja mientras dormimos. Alteraciones del sueño y el estrés crónico se han relacionado con un peor metabolismo hepático. Establece rutinas saludables de descanso y busca apoyo emocional cuando lo necesites.

¿Son útiles los suplementos "detox"?

La mayoría de productos comercializados como “limpiadores hepáticos” no cuentan con respaldo científico suficiente. El hígado no necesita desintoxicarse con suplementos si está sano: ya es el principal órgano detox del cuerpo. Algunos ingredientes como el cardo mariano (silymarina) pueden tener beneficios, pero deben utilizarse con precaución y bajo supervisión médica.

Sitio Fuente: NCYT de Amazings