El sueño tecnológico de un joven agricultor da sus frutos... y hortalizas
FAO.
La agricultura inteligente en Viet Nam ayuda a superar el carácter impredecible del clima y los mercados.
La trayectoria vital de Vu Van Hieu le ha llevado desde el calor subtropical y húmedo de Nam Dinh, en el delta del río Rojo al norte de Viet Nam, lugar en el que creció, hasta el clima más fresco y seco de la meseta de Moc Chau, zona de mayor altitud.
Pero si bien este agricultor de 35 años esperaba poder aprovechar la riqueza de los suelos ricos y las grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche de su nuevo hogar, también tuvo que enfrentarse a los retos de la agricultura tradicional en una era marcada por el cambio climático y la impredecibilidad de los precios.
“El cultivo de hortalizas al aire libre era una lotería”, explica Hieu. “A veces teníamos una cosecha excelente, pero no había mercados” para los tomates y las diferentes variedades de coles que cultivaba. “En otras ocasiones los precios eran buenos, pero las plagas o el mal tiempo lo destruían todo”.
Hieu sabía que tenía que haber una alternativa mejor. Esta llegó pronto en forma del proyecto “Agricultura inteligente para las generaciones futuras”, que se estaba llevando a cabo en su localidad. Vio los invernaderos distintivos del proyecto que se estaban instalando por todas partes y se dio cuenta enseguida de que eran mucho mejores que los tradicionales que había visto en otros lugares. Hieu no dudó un segundo en inscribirse para unirse a la iniciativa.
Financiada por la República de Corea y puesta en práctica por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la iniciativa apoya a los agricultores y cooperativas locales en la adopción de técnicas de agricultura inteligente, en particular mediante el uso de invernaderos optimizados. Estas técnicas combinan una tecnología más avanzada con precios asequibles y la adecuación a las necesidades de los agricultores. El proyecto también contribuye a mitigar la volatilidad de los precios al dotar a los agricultores de los medios necesarios para que obtengan productos de gran calidad fuera de temporada, accedan a mercados más estables mediante la acción colectiva y exploren canales de venta directa.
El equipo suministrado por el proyecto incluye redes contra insectos, una capa de plástico para proteger contra el frío y la lluvia, una red retráctil para dar sombra, sensores que monitorean la temperatura y la humedad y un sistema de riego por goteo que distribuye el agua a través de largas tuberías a cada planta para lograr el máximo efecto. Las puertas múltiples que impiden la entrada de plagas y enfermedades —lo que reduce considerablemente la necesidad de plaguicidas— son otras de las soluciones sencillas pero innovadoras que incluye la iniciativa.
El proyecto también ha proporcionado a Hieu plántulas de calidad y fertilizantes avanzados para hacer frente a deficiencias nutricionales específicas. Pero él afirma que el activo más valioso fue la capacitación técnica que recibió sobre el cultivo en invernaderos y la lucha contra las plagas.
“Nos enseñaron todo, desde cómo utilizar plaguicidas inocuos hasta cómo gestionar el entorno del invernadero” controlando la temperatura, la humedad, la luz, la ventilación, los niveles de CO₂ y el riego.
Hieu solía cultivar hortalizas al aire libre, pero se enfrentaba a los desafíos que planteaban la meteorología impredecible y la volatilidad de los precios en los mercados. © FAO/Quach Trung Dung
Estos conocimientos, sumados a su propio impulso y determinación, resultaron ser una combinación ganadora. La primera cosecha de pimientos morrones y palermos de Hieu en su invernadero de 1 836 m2 tuvo un rendimiento impresionante de 18 toneladas, lo que generó un beneficio de 500 millones de VND (casi 20 000 USD) durante una temporada agrícola de unos tres meses.
No se trataba solo de obtener beneficios, sino de demostrar el potencial de la agricultura inteligente y compartir estos métodos con toda la comunidad. “Al ver los resultados, otros agricultores se sintieron inspirados”, afirma Hieu. “Se dieron cuenta de que no era solo un sueño, sino una forma viable de mejorar sus medios de vida”.
El éxito de Hieu ha alimentado su ambición. Ha ampliado las actividades en sus invernaderos y añadió otros 2 000 m2 para el cultivo de tomates. También creó la cooperativa de alta tecnología Tan Lap, en la que participan ocho hogares para compartir conocimientos, recursos y acceso a los mercados.
Hieu y otros miembros de la cooperativa creen que, si siguen ávidos de adquirir nuevos conocimientos agrícolas, aprovecharán al máximo el potencial del clima y el suelo de Moc Chau. Además de producir una gran cantidad de productos agrícolas directamente para los consumidores, la cooperativa espera vender en plataformas de comercio electrónico y aventurarse en la experiencia del agroturismo.
Hieu ha ampliado la actividad en sus invernaderos y ha creado la cooperativa de alta tecnología Tan Lap, en la que participan ocho hogares para compartir conocimientos, recursos y acceso a los mercados. © FAO/Quach Trung Dung
Hieu sueña con transformar toda la cooperativa Tan Lap en un centro de producción agrícola inteligente; quiere que Moc Chau se convierta en un proveedor líder de frutas y hortalizas de gran calidad, no solo para los mercados locales, sino para todo el país.
“Queremos crear un sector agrícola sostenible y rentable”, explica Hieu. “Un sector que ofrezca buenos puestos de trabajo a los jóvenes y mejore la vida de todos los miembros de la comunidad”.
El proyecto no solo ha proporcionado a Hieu los instrumentos y conocimientos que necesitaba, sino que también le ha puesto en contacto con otros agricultores y expertos, creando una red de apoyo y colaboración. Hieu es ahora una figura clave en la comunidad que comparte sus conocimientos e inspira a otros a adoptar técnicas de agricultura inteligente.
Mientras Hieu y su esposa se ocupan de sus hortalizas, sus dos hijas pequeñas siguen a sus padres por el invernadero y el huerto cuando no hay escuela, mostrando quizás interés por su propio futuro en la agricultura.
De cara a las nuevas generaciones, la agricultura inteligente puede atraer a los jóvenes al sector, crear nuevas oportunidades y revitalizar las comunidades rurales. Con sus conocimientos tecnológicos y su motivación, Hieu representa una nueva hornada de agricultores que están conformando el futuro de la agricultura en Viet Nam.
Sitio Fuente: FAO