Uganda obtiene 31 millones de USD del Fondo Verde para el Clima para el primer proyecto climático de África basado en resultados
FAO.
La iniciativa dirigida por la FAO reconoce los esfuerzos de Uganda en la conservación de los bosques e impulsa la resiliencia climática.
Evaluación de los esfuerzos de conservación en el Bosque de Lázaro, Uganda. ©FAO/Agatha Ayebazibwe.
El Fondo Verde para el Clima (FVC) ha aprobado un pago en forma de subvención por valor de 31 millones de USD para un proyecto climático histórico en Uganda, en reconocimiento a los logros tangibles del país para frenar la deforestación y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Se trata del primer proyecto de pago basado en resultados aprobado por la Junta del FVC para Uganda, para África y también para un país menos adelantado, lo que supone un hito en la acción por el clima del continente.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en calidad de entidad acreditada que actúa en nombre del Gobierno de Uganda, presentó el proyecto “Pago basado en resultados REDD+ para la reducción de emisiones en Uganda (2016-17)” en la 43.ª reunión de la Junta del FVC, celebrada del 27 al 30 de octubre en Songdo.
El desembolso supone el reconocimiento de que los esfuerzos específicos de Uganda en materia de gestión forestal sostenible redujeron las emisiones netas en el equivalente a más de 8 millones de toneladas de CO₂ entre 2016 y 2017. Ello equivale aproximadamente a cultivar 133 millones de plantones de árboles durante 10 años.
“La aprobación de la subvención por parte del FVC demuestra que la financiación basada en resultados puede recompensar las medidas climáticas eficaces y reportar beneficios para las personas y la naturaleza, y supone un reconocimiento de los esfuerzos y logros de Uganda”, afirmó el Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO. “También demuestra que las inversiones tempranas en preparación y creación de capacidad pueden producir resultados transformadores para los bosques, la seguridad alimentaria y las comunidades, y es un hito importante para África”.
Preservar los bosques para la seguridad alimentaria.
Los bosques de Uganda abarcan alrededor de 2,36 millones de hectáreas, proporcionan servicios ecosistémicos fundamentales, regulan el clima y sustentan los medios de vida. Al mismo tiempo, el 90 % de la pérdida de bosques en el país se debe a su conversión para usos agrícolas, como el cultivo de la yuca y la alimentación del ganado.
REDD+, acrónimo de “reducción de las emisiones debidas a la deforestación y la degradación forestal y la conservación y el aumento de las existencias forestales de carbono”, es un marco voluntario de mitigación del cambio climático desarrollado por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. La deforestación y la degradación forestal suponen alrededor del 11 % de las emisiones mundiales.
“Los ingresos procedentes de los resultados de REDD+ forman parte de la ambiciosa movilización de fondos en Uganda relacionada con el cambio climático y demuestran claramente que la paciencia en este ámbito de importancia estratégica da sus frutos”, afirmó el Sr. Alfred Okot Okid, Secretario Permanente del Ministerio del Agua y Medio Ambiente de Uganda, al aplaudir la decisión del FVC.
Los proyectos enmarcados en el plan de pagos basados en resultados —como el codirigido por el Gobierno de Uganda y la FAO— han demostrado su eficacia en función de los costos a la hora de lograr resultados de mitigación. La FAO ha prestado apoyo a otros cuatro países —a saber, Argentina, Chile, Colombia y Papua Nueva Guinea— para que pudieran acceder a financiación del FVC por valor de 237 millones de USD.
La FAO colaborará con el Gobierno de Uganda para canalizar los 31 millones de USD desembolsados por el FVC hacia la consecución de nuevos objetivos que puedan aliviar la presión sobre los ecosistemas, asegurar mayores beneficios de REDD+ y promover la seguridad alimentaria local. El enfoque integral contribuye también a catalizar más oportunidades de ingresos, fortalecer la gobernanza, reforzar la tenencia de la tierra y mejorar los medios de vida rurales.
Por ejemplo, las plantaciones comunitarias para la obtención de postes y madera reducirán las distancias que las mujeres rurales deben recorrer para recoger leña, mientras que la gestión forestal colectiva y los acuerdos de derechos sobre la tierra ayudarán a reducir los conflictos y fomentarán el sentido de apropiación. Además, un sistema sólido de distribución de beneficios asegurará el acceso equitativo a los recursos forestales, en particular para los Pueblos Indígenas que dependen de los bosques y otros grupos vulnerables y marginados, como las mujeres.
Asociaciones armonizadas e inversión estratégica en el futuro climático de Uganda.
La FAO ha participado en el proyecto de Uganda desde sus albores y ha ayudado al país a aplicar una fase de preparación integral de REDD+ al sentar las bases para una estrategia nacional viable desde el punto de vista social y ambiental, además de haber contribuido al avance hacia los resultados obtenidos mediante políticas y medidas concretas para reducir la deforestación.
El nuevo proyecto está en consonancia con la estrategia y el plan de acción nacionales de REDD+ de Uganda, respalda las contribuciones determinadas en el plano nacional en el marco del Acuerdo de París y consolida los esfuerzos de Uganda por crear un modelo a mayor escala y coordinado nacionalmente para la resiliencia climática, la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible.
El valor total de la cartera de proyectos de la FAO financiados por el FVC asciende actualmente a 1 800 millones de USD, con 114 subvenciones a la preparación —incluidas 38 en África— y 29 proyectos de inversión en marcha en todo el mundo que benefician a más de 60 millones de personas.
Sitio Fuente: FAO