Las verdaderas bacterias que asolaron a las tropas napoleónicas en su retirada de Rusia

CIENCIAS DE LA SALUD / ARQUEOLOGÍA FORENSE.-

Un análisis de ADN de restos mortales de soldados fallecidos hace más de 200 años está reescribiendo un capítulo de la historia para sorpresa de muchos.

Calavera de un soldado del ejército napoleónico siendo desenterrada cuidadosamente. También se aprecia, asomando de la tierra, un botón del uniforme del soldado. Foto: Michel Signoli, Aix-Marseille Université. CC BY-SA 

En el verano de 1812, el emperador francés Napoleón Bonaparte lideró a cerca de medio millón de soldados en la invasión del Imperio ruso. Pero en diciembre de ese año, solo una fracción del ejército seguía con vida.

Los registros históricos sugieren que el hambre, el frío y el tifus provocaron esa gran mortandad en la retirada. Sin embargo, las cosas no ocurrieron exactamente así en lo referente a los patógenos, según el nuevo estudio.

El estudio lo ha realizado un equipo integrado, entre otros, por Nicolás Rascovan y Rémi Barbieri, del Instituto Pasteur de París en Francia.

Durante mucho tiempo se ha creído que el tifus tuvo un papel muy importante en la gran mortandad sufrida por esos soldados napoleónicos durante su retirada de Rusia. Los testimonios de médicos y oficiales del ejército sugerían que la enfermedad infecciosa principal que sufrían las tropas en retirada era el tifus, una enfermedad común en los ejércitos de la época. El hallazgo de vestigios de piojos corporales (principal vector del tifus) en los restos mortales de algunos soldados napoleónicos, y ADN de Rickettsia prowazekii (la bacteria culpable del tifus) reforzaron aún más esta hipótesis.

Disponiendo de nueva tecnología para analizar ADN antiguo, la cual no existía cuando se realizaron muchos de esos estudios previos, los autores del nuevo estudio se propusieron reanalizar muestras procedentes de soldados napoleónicos caídos en retirada para determinar si el tifus fue verdaderamente la causa principal de muerte por enfermedad infecciosa.

Los investigadores extrajeron y secuenciaron el ADN de dientes de 13 soldados enterrados en una fosa común en Vilna, Lituania, situada en la ruta de la retirada del ejército francés. Posteriormente, eliminaron toda contaminación ambiental para aislar e identificar fragmentos de ADN de patógenos bacterianos.

En vez de patógenos causantes del tifus, el equipo halló rastros de Salmonella enterica, bacteria que provoca la fiebre entérica, y de Borrelia recurrentis, que causa la fiebre recurrente y que también se transmite por piojos corporales.

Los investigadores no detectaron Rickettsia prowazekii ni Bartonella quintana, causante de la fiebre de las trincheras, que se había identificado en investigaciones previas realizadas a diferentes soldados de este yacimiento arqueológico. Rascovan afirma que esta discrepancia podría explicarse por el uso de diferentes tecnologías de secuenciación. Los estudios anteriores se basaban en técnicas un tanto primitivas de reacción en cadena de la polimerasa (PCR), un método que genera múltiples copias de un segmento específico de ADN a partir de una cantidad limitada de material inicial. Muchas técnicas de PCR previas tenían limitaciones en su uso con ADN antiguo que restaban fiabilidad a sus resultados.

“El ADN antiguo se degrada considerablemente en fragmentos demasiado pequeños para que la PCR funcionase. Nuestro método permite abarcar un espectro más amplio y capturar una mayor variedad de fuentes de ADN a partir de estas secuencias antiguas tan cortas”, explica Rascovan.

El estudio se titula “Paratyphoid Fever and Relapsing Fever in 1812 Napoleon's Devastated Army”. Y se ha publicado en la revista académica Current Biology.

Por: Redacción. 

Sitio Fuente: NCYT de Amazings