Los gatos maúllan más delante de los hombres que de las mujeres
CIENCIAS DE LA VIDA / ZOOLOGÍA / COMPORTAMIENTO ANIMAL / MASCOTAS.
El gato doméstico necesita trabajar más duro para conseguir el amor y el afecto de los hombres que de las mujeres.
Puede ser por estrategia o por hábito: los gatos maúllan más a ciertas personas que a otras. / Crédito: Lloyd Henneman en Unsplash.
Los investigadores midieron el maullido de los gatos frente a sus cuidadores masculinos y femeninos: tanto en frecuencia como en volumen, fue notoria la diferencia en favor de los hombres. Los especialistas creen que se debe al carácter más distante y esquivo de la mayoría de los cuidadores masculinos, que obliga a las mascotas a llamar su atención y ganarse su afecto.
Un estudio reciente sugiere que los gatos domésticos ajustan su maullido según el género de su cuidador: cuando un hombre entra en casa, los felinos maúllan más y con más frecuencia que cuando quien llega es una mujer. La diferencia no es menor: en el primer minuto de contacto, los investigadores registraron un promedio de 4,3 maullidos con hombres frente a 1,8 con mujeres.
La investigación, publicada en la revista Ethology y liderada por un equipo científico de la Universidad de Ankara, en Turquía, observó a 31 gatos y a sus cuidadores en su entorno doméstico. Cada cuidador llevó una cámara en el pecho para grabar los primeros 100 segundos tras entrar en el hogar: según explica la BBC, los científicos analizaron 22 comportamientos distintos, desde frotamientos y posturas sociales hasta bostezos y número de maullidos, para establecer una radiografía del saludo felino.
Conductas atadas a las respuestas.
¿Por qué más maullidos cuando el que llega es un hombre? Los autores sostienen que las mujeres, en promedio, tienden a hablar más y a responder con mayor rapidez a las señales de sus gatos, por lo tanto los felinos no necesitan profundizar el contacto.
Por el contrario, los cuidadores masculinos tienden a interactuar verbalmente menos: los gatos han aprendido a usar vocalizaciones más frecuentes para captar su atención. En otras palabras, los felinos pueden modificar su conducta para obtener una respuesta, según indica Phys.org.
Otras dinámicas.
Las conclusiones, sin embargo, requieren su replicación en otras culturas y con muestras mayores antes de hablar de un comportamiento “universal” de la especie. Además, medir solo los primeros 100 segundos tras la llegada del cuidador o cuidadora limita la observación a un momento concreto: otras dinámicas del día a día podrían ofrecer matices distintos.
El punto clave es que los gatos optimizan su comunicación según la respuesta que reciben. Cuando la mascota maúlla con insistencia, puede ser una señal de que necesita reforzar su relación con su cuidador: hablarle, acariciarlo o responder a su saludo reduce la necesidad del maullido constante.
Por: Redacción T21.
Sitio Fuente: Levante / Tendencias21